¿Cómo pasarías tus últimos 38 minutos de vida?

3 min de lectura

No tienes que estar en Hawaii para vivir como si estuvieras a punto de morir.

El sábado a la mañana, los habitantes de Hawaii recibieron en sus teléfonos un alerta de emergencia: “Amenaza de misil balístico en dirección a Hawaii. Busquen refugio de inmediato. Este no es un simulacro”.

Con el incremento de la tensión entre los Estados Unidos y Corea del Norte, los hawaianos entraron en pánico, creyendo que eran el objetivo de un ataque nuclear. Algunos corrieron hacia los sótanos, otros se escondieron debajo de las mesas y otros se metieron en las alcantarillas de la calle.

Llevó 38 minutos hasta que el estado difundió un mensaje corrigiendo el error y explicando que se trataba de una falsa alarma. El Centro de Operaciones de Emergencia luego le informó al mundo que uno de sus empleados simplemente había presionado el botón incorrecto, y añadieron: “Esta persona ha sido temporalmente reasignada dentro de nuestro Centro de Operaciones de Emergencias y su puesto depende de los resultados de nuestra investigación interna”.

Ups.

El mensaje recibido: "Amenaza de misil balístico en dirección a Hawaii. Busquen refugio de inmediato. Este no es un simulacro".

Durante 38 minutos, 1,4 millón de personas se desesperó por asegurar su seguridad pero también hicieron algo más. Al pensar que el catastrófico ataque era inminente, se vieron forzados a considerar cómo deseaban pasar sus últimos momentos en la tierra. Gracias a Dios, fue solamente una falsa alarma y la extensión del daño fue la ansiedad que causó innecesariamente.

De todas maneras, esta desafortunada experiencia nos enseña a todos una importante lección. Si te quedaran sólo 38 minutos de vida, ¿cómo los pasarías? ¿Qué harías? ¿Abrirías un libro de Torá para estudiar? ¿O un libro de plegarias? ¿Buscarías el teléfono para llamar a alguien y decirle que lo amas? ¿Te conectarías con alguien con quien estás alejado para tratar de reconciliarte?

Tómate unos momentos y piensa qué harías si pensaras que te quedara un tiempo limitado para vivir.

¿Por qué no haces eso ahora mismo?

Hilel nos advierte: “No digas: ‘estudiaré cuando tenga tiempo libre’, porque quizás nunca tengas tiempo libre” (Pirkei Avot, 2:5). No podemos predecir cuánto viviremos y si posponemos o nos demoramos, es posible que nunca lleguemos a aquello que afirmamos son nuestros objetivos y aspiraciones.

La porción de la Torá de esta semana nos advierte: “Ushmartem et hamatzot – cuiden las matzot para que no se vuelvan jametz”. Rashi cita el Midrash que nos alienta a leer el versículo como si dijera: ushmartem et hamitzvot, cuiden los mandamientos. Si se presenta en tu camino una oportunidad positiva, no permitas que se vuelva jametz a causa de tu pereza y tus postergaciones. En cambio abrázala, corre hacia ella y cúmplela de inmediato, antes de que sea demasiado tarde.

La muerte siempre ha sido uno de los motivadores más potentes. El autor budista Sogyal Rinpoche escribe: “La muerte es un espejo en el cual se refleja todo el significado de tu vida”. El Talmud (Shabat 153a) registra la enseñanza de Rabí Eliezer: “Arrepiéntete un día antes de tu muerte”. Sus discípulos le preguntaron: “¿Cómo puede saber la persona cuándo va a morir?”

“¡Ese es exactamente el punto!”, les respondió. “Que se arrepienta hoy por si llega a morir mañana, y de esta forma vivirá todos sus días en arrepentimiento”.

Una profunda canción folclórica norteamericana dice: “Espero que algún día tengas la oportunidad de vivir como si estuvieras muriendo”. Los habitantes de Hawaii tuvieron esa oportunidad la semana pasada. Nosotros no necesitamos esperar un alerta de emergencia. Pregúntate a ti mismo qué harías si te quedaran unos pocos minutos para vivir y no esperes, hazlo ahora mismo.

Haz clic aquí para comentar sobre este artículo
guest
0 Comments
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
EXPLORA
ESTUDIA
MÁS
Explora
Estudia
Más
Contacto
Lenguajes
Menu
Donar
Únete a nuestro newsletter
Redes sociales
.