¡Has Perdido Peso!

2 min de lectura

Como dar cumplidos efectivamente.

¿Te suena familiar este escenario? Yo estaba con un grupo de mujeres el otro día cuando alguien a quien no había visto en bastante tiempo se acercó. "Te ves excelente", le dijo una de las mujeres a ella. "Has perdido mucho peso".

"Ehh… mmm… es solamente esta tenida; me hace ver más delgada", tartamudeó ella.

Años de entrenamiento por parte de mi esposo han hecho efecto en mí. "Solamente di gracias", le dije yo.

"Gracias", murmuró ella.

Es tan difícil aceptar un cumplido. Si nos dicen que nuestra tenida se ve atractiva, inmediatamente desviamos la alabanza. "Es viejo – lo tengo hace mucho tiempo". O "Costó muy barato – lo compré en oferta".

¿Y qué pasa si alguien dice "Tu cocina se ve genial"? "Supongo que no notaste la pintura saltada".

"Has criado una hermosa familia". "No sabes las luchas que hemos tenido con… completa tú la frase".

¡Solamente di gracias!

Pero no estoy aquí para hablar de los porqués de nuestra conducta, para analizar la psique femenina, para hablar de lo adquirido versus lo heredado.

Sino que quiero darle un consejo a la persona que da los cumplidos para que el receptor no pueda escabullirse de el. (Y quizás tenga el desafortunado resultado de desmotivar para futuros intentos). Quiero hablar acerca de una estrategia que hará que el elogio casi siempre sea recibido gentilmente. Quizás si practicamos dar cumplidos sabiamente seremos capaces de aceptarlos de la misma forma.

No digas solamente el cumplido y permitas que se quedé ahí en el aire. Continúa con una pregunta.

Es una idea simple pero puede cambiar toda la experiencia (¿No les encantan esas ideas?).

Aquí va: no digas simplemente el cumplido y permitas que se quede ahí en el aire. El receptor se siente muy incómodo y siente una consecuente necesidad de justificar porqué no se lo merece.

En vez, continúa con una pregunta. Esto le dejará a quien escucha poco tiempo para pensar en sus inseguridades y racionalizaciones y estará obligado a responder.

Esto no es complicado, y puede hacer una gran diferencia.

En vez de simplemente decir, "Me encanta tu vestido", di: "Me encanta tu vestido. ¿Dónde lo compraste?". De esta forma, en vez de conversaciones que terminan con el cumplido, pueden comenzar con uno.

"Esos colores te quedan muy bien. ¿Cómo pensaste en cuáles ponerte?".

"Ese es un corte de pelo maravilloso. ¿A qué peluquería vas? ¿Quién es tu estilista?".

"Has criado una familia maravillosa. Estoy segura que hay desafíos pero lo haces parecer fácil. ¿Cuál es tu secreto?".

"Esa torta estaba deliciosa. ¿De dónde sacas tus recetas?".

Y así, tus conversaciones nunca serán lo mismo. A todos les gustan (y necesitan) los cumplidos. Mientras sean reales, sinceros y considerados, las personas seguirán volviendo a hablar contigo una y otra vez. Cuando se vayan, se sentiran mejor con ellos mismos porque aquel fue un cumplido que fueron capaces de recibir. Simplemente pruébalo.

No elogiamos a otros lo suficiente y con certeza no lo hacemos efectivamente. Pero no es demasiado tarde…

Nunca me han gustado esas líneas desechables sobre cuanto peso he perdido. Sin duda, nunca estuve segura de que responder. "¿Acaso me veía como un elefante antes?".

Haz clic aquí para comentar sobre este artículo
guest
0 Comments
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
EXPLORA
ESTUDIA
MÁS
Explora
Estudia
Más
Contacto
Lenguajes
Menu
Donar
Únete a nuestro newsletter
Redes sociales
.